miércoles, 1 de mayo de 2013

...Y VENGA A VERTE (Habanera triste y sin timón)



...Y VENGA A VERTE (Habanera triste y sin timón) - Nel.lo Herrerías



Érase un barco chiquito, pero velero,
con su sirenita y su marinero;
casi siete años por los siete mares:
la calma, a dúo; la marea, a pares.

La risa era brisa y el amor el viento
con el que navegaban el firmamento:
atracando puertos, recorriendo el mundo,
viviendo la Vida a cada segundo.

Sudor, afecto, agua y sal se mezclaban
cuando a cubierto o en cubierta se amaban;
arriaron las velas, vendieron el ancla
e izaron ¿para siempre? una bandera blanca.

Pero, un día, olvidaron que el timón
es parte importante de la embarcación
y, perdiendo el rumbo del corazón, 
se fueron a pique ...sin remisión.

Porque hubo, al final de la travesía,
epidemia a bordo de monotonía:
el mar se secó y huyeron los peces,
Poseidón murió ocho o nueve veces...

Luego un vil pirata abordó el navío:
raptó a la sirena y se dejó el frío
anclado en el alma del marinero
que allí sigue, varado, en aquel velero

Esperando que vuelva su sirena,
haciendo un collar de coral y pena...
Quizás algún día cambiará tu suerte,
y ella huya del pirata ...y venga a verte.

Aunque, un día, olvidaran que el timón
era parte importante de la embarcación
y, perdiendo el rumbo del corazón, 
se fueran a pique ...sin remisión.


...Y venga a verte:
maldita sea, mi amigo, tu suerte.
...Y venga a verte:
si no viene ella, ya vendrá la Muerte.
...Y venga a verte:
ni te hagas el loco ni te hagas el fuerte.
...Y venga a verte:
la perdiste y perdiste; no quieras perderte.






miércoles, 27 de marzo de 2013

JOAQUÍN EL NECIO



JOAQUÍN EL NECIO - Albert Pla

Yo que estaba acostumbrado
a dormir acompañado,
yo que tanto la había amado
son diez años de casado... 

"¿Por qué te fuiste, Rosa, mi vida?
¿Por qué te fuiste con ese negro?
¿Por qué te fuiste si yo te quiero?
¿Qué tendra el negro que yo no tengo?"
se preguntaba Joaquín el Necio:
metro sesenta, bajito y feo,

de ideas fijas, un tipo duro,
marido cornudo, padre gruñón
y de oficio
zapatero remendón...
¡ay, qué tacón!
 


"Será que tiene un pollón grandote,
que el negro tiene un cacharro enorme...
¡qué puta que eres, Rosa, mi vida:
perder el culo por un cipote...! 
 
Será que Rosa se ha vuelto loca
y no por su cosa se quiere al hombre,
sino que dentro hay mucha más gracia:
yo tengo mucha gracia interior...",
se lamentaba Joaquín el Necio,
celoso y macho, muy hombre que era:

"Yo te perdono, Rosa, mi vida,
pero ese tipo no tiene perdón...

Yo le capo 

a ese negro por ladrón...
¡ay, qué dolor!


Una vez que el último zapato

estuvo arreglado, salió a la calle
navaja en mano, sol de verano,
en un bar del centro los encontró;
y entró en el bar y se hizo el silencio,
la clientela apuró los vasos
y, sin dar tiempo, Joaquín el Necio
le cortó al negro su falo entero...

Rosa lloraba sobre la barra,
el negro en el suelo se desangraba,
Joaquín se limpiaba su navaja
la clientela volvía a beber...

"¡Joaquín,
pero qué pasa, cornudo!"...
¡ay, qué pasión!


Joaquín miró la parte amputada
y de verdad que eso no era nada...
"¡Ay, qué tendría el maldito negro!
¿Qué tendrá el negro que yo no tengo?
Será que Rosa se ha vuelto loca...
¿Por qué te fuiste con ese negro?
¿Por qué te fuiste si yo la tengo
mucho más grande... aquí no hay color?"
 
Lloró de rabia Joaquín el Necio,
no comprendía, preguntó al cielo,
la clientela llenó los vasos
y al unísono le respondió:

 "¿Pero por qué será, Joaquín,
por qué?
¿Por qué será?..."


Porque el negro es mejor que tú:
no tiene malicia ni mal corazón;

el negro es mejor que tú:
es más bondadoso y más vacilón;
el negro es mejor que tú:
no tiene perfidia, es más bonachón;
el negro es mejor que tú:
es más honrado y trabajador.

martes, 19 de marzo de 2013

PARA TODA LA VIDA





PARA TODA LA VIDA – Fito y Fitipaldis (Fito Cabrales)





Cuando estuviste conmigo
jamás te dije mentira;
quería tenerte en mis brazos,
pero por toda la vida.


Y tú querías aventura,
tomaste muy mal camino:
ibas buscando basura
en un terreno barrido.


Yo le di mi querer al querer,
y lo di para toda la vida:
si quisiera vivir de placer,
me buscaba un amor de cantina...
Yo le di mi querer al querer,
y lo di para toda la vida...


Cuando estuviste conmigo
tenías un mal pensamiento;
si yo lo hubiera sabido,
no hubiera perdido el tiempo.


Tendrás el mundo en tus manos,
tendrás montones de pesos...
si a otros los tienes llorando,
conmigo, ¿tocaste hueso?


Yo le di mi querer al querer,
y lo di para toda la vida:
si quisiera vivir de placer,
me buscaba un amor de cantina...
Yo le di mi querer al querer,
y lo di para toda la vida...


Yo le di mi querer al querer,
y lo di para toda la vida:
si quisiera vivir de placer,
me buscaba un amor de cantina...
Si quisiera vivir de placer,
¡ay! para toda la vida...

domingo, 27 de enero de 2013